Era un pick up azul del año 2,005 en el viajaban Roberto, Raúl
Castro, Timea, Greta y Rene. Venían de una fiesta en Antigua Guatemala el día
anterior. Roberto había conocido ese camino varios años
atrás cuando la tormenta había destruido la
carretera principal. El camino
era hermoso casi no habían autos y casas
tampoco había sido la carretera principal 50 años antes.
Después de 3 horas por este camino bastante abandonado al que le faltaban algunos puentes y le
sobraban bastantes hoyos, llegaron esa tarde a la ciudad, La primera cosa que
hicieron fue buscar un parqueo, la ciudad estaba de fiesta así que eso hizo que
se complicara un poco. Después de unos minutos y fallidas negociaciones con el dueño del parqueo decidieron que sería
mejor llamar al cuñado de René para pedirle un lugar donde dejar el auto. René saco su teléfono y marco. Y dijo –Jessy podemos dejar nuestro auto en
tu casa, hay espacio? Jessy contesto
–claro. Habían hablado un par de horas
antes sobre estar en la misma ciudad y coincidía que la hermana de René estaba
también allí. Tomaron el camino hacia el
mercado del pueblo cruzaron a la derecha
y en el siguiente desvió a la derecha de
nuevo, hasta llegar a los residenciales Panajachel, allí René se bajo del auto
hablo con el guardia, dejo su identificación y las puertas se abrieron.
Tardaron unos minutos
en llegar. Cuando René vio la casa de adobe pensó esa
debe ser. De la casa salió Jessy un chico americano de 25 años estaba más
flaco desde la última vez que le vio hacia 3 semanas. Estacionaron el auto y bajaron las maletas de
pronto comenzó a llover un poco.
Entraron todos al jardín para no mojarse y el corazón de René comenzó a latir con fuerza, era hermoso el jardín. René estaba un poco celoso. No solo de la casa, suponía que dos fines de
semana pasados Georgina había estado
allí, en su mente imaginaba lo que ella había dicho, sobre el jardín, el adobe,
el sabia que ella quería vivir en lugar así, el pensaba que a él también le gustaría vivir así, con ella.
Pero ella no estaba. Él
le invito a conocer la casa, el no quería entrar, sabía que le rompería el
corazón conocer la casa, que si de
afuera era linda, también lo sería de adentro.
Así que prefirió sentarse en el jardín.
Jesús pregunto - desean algo de
tomar, agua o Whiskey? René dijo –claro
tráeme un whisky- él lo hubiera preferido doble, se había vuelto alcohólico
unos meses antes, así que porque no
seguir, ya eran las 4 era una buena hora para comenzar. Hablaron de la casa y del loco que era el
dueño, decidieron encender el fuego y pedir unas pizzas. 30 minutos después René Destapo su botella de
Palinka (palinka es un licor Húngaro) esta botella era una buena botella, se
conoce los alcoholes por lo suave y su
fuerza. Mientras más finos son más suaves.
La botella había venido de Hungría, aunque la compraron en el aeropuerto
de Paris. La trajo una antigua amiga,
que había conocido 4 años antes en un pueblo en las montañas. Ella Timea había sido amante de en aquel
tiempo de Roberto uno de los mejores
amigos de René. Ahora había regresado
para visitar Roberto, que claro viajaba
con ellos. El pregunto quien quería un
trago, para su sorpresa todos dijeron que si.
Ya había pasado más de 45 minutos desde que pidieron las pizzas pero no
habían llegado. Todo el corredor estaba lleno de maletas, René
que había sido tan invasivo siempre, se dijo para sí mismo, ya le invadimos y
se sintió un poco avergonzado. Por la misma razón no había querido pedirle el
parqueo desde el principio en la casa, hasta que vio que no había otra
opción. Las pizzas no llegaron, así
que René acompaño a Raúl Castro a la tienda por unos cigarros. René se fue con Raúl necesitaba pensar en
otras cosas o distraerse un poco. Salieron de los residenciales, a él le gustaba
mucho la zona. Caminaron, visitaron varias
tiendas y nadie vendía cigarros así que decidieron ir para el otro lado de la
carretera en dirección al pueblo.
René se preocupaba un poco por el señor de las pizzas el dueño de la pizzería se quedaría con 3 pizzas frías
y perdería dinero si no encontraban la casa.
Desde hace un tiempo la René le preocupaban las personas, eso era algo
que había aprendido de ella. En la
tienda donde encontraron los cigarros varias cuadras después estaba parado el
chico de las pizzas con ellas en la mano.
Decían que no lo habían dejado entrar en los residenciales porque no tenía su DPI (documento de identificación
personal) como le decían. Raúl Castro
pago las pizzas y volvieron con sus cigarros y la comida. En el camino Raúl y René hablaron sobre la
estabilidad que necesitan las parejas, estabilidad emocional, estabilidad
económica, estabilidad de lugar, René
estaba sorprendido de cómo todas las personas tenían algo que enseñarle. Comieron las pizzas, René por fin entro a la
casa, vio el baño y la cafetera italiana que estaba sobre la estufa, también le
gustaron las copas de vino eran altas y esbeltas como a René le gustaban, aunque no tenía
ninguna. Ahora que lo pensaba René el
también tenía 2 no eran para vino, sino para los Martinis y eran hermosas
también. Comieron las Pizzas y por fin
se fueron a buscar un hotel. René pensó
que tenía años de no buscar un hotel en Panajachel. Llegaron a un lugar se llamaba la palapa, René
pensó que iba a hacer un poco inseguro y
que habría mucho ruido esa noche, pero parecía limpio y le gusto que las
camas fueran nuevas. Decidieron
quedarse. Una hora después todos
jugaban Pokar en una mesa, René no
estaba de humor pero se sento con ellos,
pensó en el consejo que le había dado a Georgina una vez
Preocúpate solo cuando puedas hacer algo. Así que se relajo, comenzó a
sentirse mejor. Decidió que no bebería
mas, las últimas semanas había bebido casi todos los días y no había podido
salir de aquella melancolía que le envolvía.
Paso una hora, René perdió en el pokar como siempre él pensaba que si tal
vez tenía mala suerte en el amor, este sería
un buen día para jugar. Ya saben
el dicho Afortunado en el Juego desafortunado en el amor. Pero no fue así, perdió de nuevo, al menos
eso le daba un poco de esperanza. Todos
pidieron sus tragos, ginebra por aquí,
cubas por allá y René se tomo una botella de agua pura.
En la mesa del lado había
una pareja. El tenia 28 años y se
llamaba Walter Eduardo ella se llamaba Liu.
Eran jóvenes pensó el pero discutían como viejos. Ella le decía que ya no tomara. El solo le decía mi amor, porque esta así,
porque se enoja. René vio el show
por una hora y de repente se vio él en
la misma situación aunque él nunca discutió tanto con ella, según recuerda y
menos en lugares públicos. En un
momento René no pudo más se cambio de mesa
y les dijo –Disculpen que me meta, pero no hay algo que quiero decirles. Les he visto por un rato y no he podido dejar
de escucharles. Ellos dos sorprendidos le pidieron que se sentara. El les dijo que le disculparan pero no podía
permanecer sin hacer nada viendo como lo
que había entre ellos se hacía mierda.
Le pidió al chico que la escuchara a ella, ella estaba
tratando de decirle algo pero él no quería escuchar, que las mujeres son más
inteligentes que los hombres y que ven cosas que nosotros no vemos. El hablaba con René en Ingles, aunque ella
le decía que no hiciera eso que René solo hablaba español. Ella hablo de que el problema que el tenia
era que bebía mucho, que ella solo estaba allí por él, que habían sido novios
por 4 años y que había vuelto con él un día que se había muerto el abuelo de él. René le dijo a el que era un alcohólico que sería
mejor dejar de beber, hicieran actividades juntos. René les dijo – los hombres estamos divididos en 3 el cuerpo,
el espíritu y el alma. El cuerpo se
ocupa en el placer, en el trabajo y en la búsqueda interior, y está afectado
por el ambiente. Si uno de estos falla
entonces trataremos de buscar un camino fácil
para salir de allí, en tu caso Walter es el alcohol y el show, actúas conmigo hablando en ingles, te acercas
a las mesas de otros y no te das cuenta
que la persona más importante, tu compañera está sentada aquí contigo. Te lo digo Walter porque la estás perdiendo,
lo he podido notar desde la otra mesa, cambien de ambientes no todo tiene que ser fiesta, suban un volcán,
vayan a clases de cocina juntos, cómprale
un anillo, no para casarse. Compra una
alianza y entonces René tuvo una revelación: Por eso se llaman los anillos
alianzas, este rito se comenzó en Egipto y simboliza
algo espiritual, para los romanos pensaban que en el dedo donde se ponía estaba
la vena del amor, que llegaba directo al corazón. Pero también significa
compromiso y compromiso se entiende por llegar a acuerdos entre dos
personas. Así que Walter cambia o la perderás. Walter se paro pidió perdón a ella enfrente
de René. Ella dijo a René – Gracias es
usted un Ángel.
Antes de marcharse René le dijo a Walter –Eres un hombre con
suerte eres tal vez la única persona que en este momento se le ha aparecido alguien para ayudarlo en
su amor. Walter le dio las gracias. René mientras se sentaba en su mesa, vio como Walter le besaba la mano a la chica, René estaba contento, alguien no tendría que
sufrir el mismo viaje al interior de sí mismo.
10 minutos después Walter se paro por una cerveza y le dijo a René – Mi problema
es que soy muy bolo.
Walter y Liu se dejaron
un mes después.
René se despertó al otro día, eran las 9 de la mañana, se
fue a café las chinitas en Panajachel y se pidió un café y una galleta de macadamia y escribo esta
Historia para Simone.